La piel es el órgano más grande del cuerpo humano, por lo que precisa una nutrición correcta y completa para que no se noten sus carencias. Es muy importante que tanto vitaminas como minerales se obtengan a través de la dieta y, sólo cuando sea necesario, recurrir a suplementos alimenticios.

Para cuidar la piel desde dentro es fundamental tener en cuenta 4 puntos:

• Beber mucha agua, sobre todo en verano, para mantener la hidratación y eliminar toxinas. 

• Hacer actividad física, al menos 3 veces a la semana.

• Seguir una alimentación variada y equilibrada.

• Dormir 8 horas diarias.

Hay determinadas vitaminas y minerales que son esenciales para el cuidado y belleza de la piel: vitamina A, vitamina B3, vitamina B6, vitamina C, vitamina E, selenio, zinc y cobre. 

Vitamina A

• Proporciona suavidad a la piel, refuerza sus defensas naturales y favorece su cicatrización, evitando una piel seca y áspera. 

• Se encuentran en frutas como sandía, melón, mango, ciruela, fresas y melocotón;  y en verduras como calabaza, zanahoria, pimiento rojo, espinacas y tomates. También en alimentos de origen animal como carnes magras, pescado, hígado (vacuno cordero o pescado), quesos y yogur.

Vitamina B3

• Protege la piel del calor y disminuye la aparición de manchas proporcionando un color de  piel más uniforme.

• Es un poderoso antioxidante, lo cual ayuda a disminuir arrugas y líneas de expresión.

• Favorece una adecuada hidratación de la piel.

• La encontramos en frutas como aguacate, melón, mango, plátano y cerezas; en productos de origen vegetal como cereales integrales, legumbres, cacahuetes, semillas de girasol y dátiles; en productos de origen animal como carnes magras, pescados, hígado, leche y derivados.

Vitamina B6

• Equilibra las pieles grasas, reduciendo la secreción de las glándulas sebáceas.

• Una carencia de esta vitamina causa piel grasa con escamas y erupciones.

• Se encuentran en frutas como plátano y aguacate; productos de origen vegetal como cereales integrales, legumbres y frutos secos; en productos de origen animal como carnes magras, pescado azul.

Vitamina C

• Ayuda a la cicatrización de heridas en la piel y aumenta la síntesis de colágeno (proteína del tejido cutáneo necesaria para que la piel conserve su elasticidad y firmeza).

• Antioxidante natural (destruye los radicales libre y protege la piel contra los rayos ultravioleta).

• Se encuentra en frutas como fresas, kiwi, cítricos, melones y coco; y verduras como pimientos, espinacas, tomate y brócoli. 

Vitamina E

• Es la principal vitamina antioxidante.

• Mejora la elasticidad de la piel, reduce las manchas y retrasa el envejecimiento cutáneo. 

• Se encuentra en frutas como aguacate, papaya y coco; en verduras como acelgas, espinacas y brócoli; en semillas y frutos secos como almendras, semillas de girasol, calabaza, avellanas y nueces; y en aceites como el aceite de oliva y el aceite de  girasol.

Selenio

• Tiene un gran efecto antioxidante. Junto a la vitamina E, nos protege contra los radicales libres retardando el envejecimiento.

• Se encuentra en frutas como plátano, aguacate, kiwi y sandía; en verduras como acelgas, espinacas y brócoli; en productos de origen animal como carnes magras, huevos, productos lácteos y pescado azul (salmón, sardinas, atún…); en semillas y frutos secos como cacahuetes, nueces y semillas de girasol; y en productos de origen vegetal como lentejas, alubias y avena.

Zinc

• Junto con la vitamina A, protege contra los rayos solares,  evita secar la piel, previene el acné, tiene propiedades antiinflamatorias y participa en la formación del colágeno.

• Se encuentra en frutas como aguacate, granadas, plátano, sandía y nectarina; semillas y frutos secos como pistachos, nueces, almendras y semillas de calabaza; en productos de origen animal como carnes magras, pescado, mariscos huevos, queso y leche; en productos de origen vegetal como legumbres, cereales integrales, levadura de cerveza y chocolate negro.

Cobre

• Interviene en la formación de colágeno y de melanina, pigmento necesario para proporcionar la coloración a la piel.

• Se encuentra en frutas como piña, albaricoque, mango y fresas; frutas deshidratadas como ciruelas, pasas y dátiles; en verduras como champiñones, berenjena y espinacas;  en semillas y frutos secos como anacardos, nueces, almendras y semillas de girasol; en productos de origen vegetal como avena, legumbres, cereales integrales y chocolate negro; y en productos de origen animal como hígado, carnes y mariscos.