FEMINISMO

LIBERACIÓN OPRESORA: CUANDO LA OPRESIÓN SE VUELVE EMPODERAMIENTO

Muchas veces se me ha cuestionado si soy suficientemente válida como para hablar del Islam,a día de hoy, sin llevar velo y como defensora del mismo,o como mujer musulmana, hablaré de feminismo.

LIBERACIÓN OPRESORA: CUANDO LA OPRESIÓN SE VUELVE EMPODERAMIENTO

Debo decir que no soy feminista. Vengo a exponer que el velo, el hijab, no es solo una prenda. Es protección, es valor, es coraje, es integridad, es amor propio, es seguridad, autoestima, cosas que occidente ha despojado totalmente a las mujeres. Solo soy una mujer que está harta. Harta de ver como se nos menosprecia, harta de ver que aunque hayan pasado siglos y siglos avanzando, hayamos dado pasos hacia atrás. Harta de que la corrupción y la decadencia moral que nos rodea, quiera someternos y ni siquiera podamos replicar.

Parece que despojarnos de nuestra integridad, de nuestro derecho a ser mujeres les ha venido anillo al dedo a los misóginos, pronto la palabra mujer, no incluirá ni tener pechos, ni tener vagina por la que menstruamos y sufrimos horas y horas de duros partos, pero incluirá la coquetería, querernos arreglar, el brilli brilli rosa, un buen escote y una falda, para las más empoderadas. Los que nos ven como sus chachas son los mismos que nos ven como sus agujeros donde meter sus miembros, no nos confundamos, ahora con un plus.Tu marido al menos debía saberse tu nombre, antes de que le limpiaras la cocina, ahora ni siquiera tendrá la necesidad de saberlo, todo bajo el manto brillante de la liberación sexual, bajo el manto de la liberación femenina, les ha venido como anillo al dedo. Se nos ha esclavizado, de nuevo y en occidente, hermanas, amigas, y ninguna de nosotras puede darse cuenta de ello.

En el mundo, nuestro valor no se mide ya por la cantidad de ropa que nos ponemos sino por la cantidad de ropa que estamos dispuestas a quitarnos para complacer al resto. Incluso las mujeres con hijab, ahora son vistas como un nuevo nicho que explorar para el mercado, pronto ellas también sucumbirán a los encantos del liberalismo cultural. Con maquillajes excéntricos, mostrando sus perfectas vidas o sus outfits, rompiendo totalmente con el mensaje inicial de lo que es el Hijab y lo que es ser mujer musulmana... 

Volviendo al tema de la liberación occidental: Para demostrar cuan liberadas estamos, no debemos buscar ataduras emocionales con ningún hombre, pero sí ofrecer nuestro cuerpo como un servicio ya prácticamente donde supuestamente nos prometen que se nos va a respetar y aportar placer. ¡Vemos aplicaciones donde literalmente nos ofrecemos como en un mercado, donde el precio y la oferta la hemos puesto nosotras! Y ellos...Y a nadie le parece algo por lo que llevarse las manos a la cabeza aún así, occidente se ve con las agallas de meterse con Oriente por supuestamente ver a la mujer como un objeto. ¿Qué sacamos de eso?

La modernidad nos ha dejado vacías, toda expectativa de ser amadas, valoradas, se ve como algo antiguo, bizarro, estúpido, o algo por lo que sentir vergüenza. Cuando todas sabemos que eso es mentira. ¿Cuántas de vuestras amigas, os cuentan la frustración que tienen consigo mismas aun habiendo compartido cama con hombres totalmente libres y poliamorosos como ellas? O si me permitís la indiscreción,¿cuántas de vosotras ha intentado mantener una relación estable y desistir por no encontrarse con un hombre maduro, preparado para atarse, y sin miedo a ello? O si no lo habéis buscado nunca, preguntaros por qué. Esos no son mis argumentos, lo sé, pero es suficiente como para que empecéis a reflexionar y cuestionaros lo que esconde la liberación occidental de la mujer. 

Dicho esto, basta de palabras huecas amigas, hay que aportar pruebas de lo que una habla.

El sexo casual puede derivar en ansiedad y depresión, esa es la conclusión que llegaron en un estudio que fue realizado por investigadores de varias universidades de EE. UU, después de estudiar a 4.000 alumnos heterosexuales. Los investigadores reclutaron una muestra multiétnica, solteros de entre 18 y 35 años, de 30 universidades. Por participar, los estudiantes recibieron un crédito,(la forma de medir el tiempo en no solo universidades americanas sino españolas).En el estudio, se les pidió a los estudiantes que recordaran con qué frecuencia en los 30 días anteriores habían tenido relaciones sexuales con alguien que habían conocido por menos de una semana.

Nos han vendido el cuento de que para liberarse no hay que atarse, pero realmente es un engaño, aplicado a hombres y a mujeres. Aunque ese podría haber sido no hace muchos siglos atrás el sueño del varón hecho realidad, disfrutar de cuántas mujeres quiera sin tener que rendir cuentas porque claro,¿no querrás ser una moralista retrógrada? Te hace falta deconstruirte, a ti amiga, por exigir que antes de abrirte de piernas, deis un paseo, sepa como se llama tu abuelo, tu hermana, o cualquier otro dato irrelevante al resto pero relevante a ti, que por algo eres humana, que por algo ese es tu compañero. O simplemente respete que simplemente no te apetezca mantener relaciones, y que sí, soy moralista y consciente y defensora encima del moralismo. Pero dejando eso de lado amiga, recuérdale a tu compañero, que antes de follar, debe madurar. 

Amor propio, analizar tus actos, afrontar sus consecuencias, no esconderte de ellos, y aprender, sobre todo de sus consecuencias, infórmate, no te cierres a la lectura, y si vas a prejuzgar, hazlo como si te lo estuvieses haciendo a ti. Cultivarte, como si fueras tu propio huerto, en ese sentido. Y saber, que tu Dios, que es el mío, el de todos, en todo tiene una hikma, es decir un fin. Que las cicatrices que te ponga la vida, siempre sean más leves que tus bendiciones. En un mundo donde el tiempo vale dinero, exigir tiempo, pausas y reflexión, es extraordinariamente revolucionario. 

LIBERACIÓN OPRESORA: CUANDO LA OPRESIÓN SE VUELVE EMPODERAMIENTO
You are using Opennemas CMS
TRY IT NOW